El diccionario de acordes de piano se organiza de acuerdo al uso de los acordes, no por orden alfabético con el nombre del acorde. De esta manera, podrás encontrar los acordes ordenados desde aquellos que más se utilizan en las partituras musicales (al principio del diccionario) hasta aquellos que se utilizan menos (al final del diccionario). En la práctica, algunos acordes son más utilizados que otros en las partituras musicales.
En este diccionario, además, verás que algunos acordes tienen más de un nombre: F sostenida (F#), por ejemplo, puede llamarse también G bemol (Gb). El diccionario de acordes de piano lista el nombre del acorde que más se utiliza, con una referencia a otras nomenclaturas.
Hay diferentes nombres de acordes que van acompañados de símbolos: el Mayor C es el nombre del acorde, pero puedes verlo acompañado de otros símbolos, que denotarán el mismo acorde. El acorde C Mayor puede representarse de muchas maneras, dependiendo de los años y nacionalidad de la partitura musical y de la elección del editor de la partitura: C, C ma, C maj son representaciones aceptadas para referirse al acorde Mayor C.
Los símbolos que encontrarás al principio de cada entrada en el diccionario, C, por ejemplo, serán aquellos que más se utilizan en la notación contemporánea o en las partituras americanas publicadas por las editoriales más importantes, como puede ser Hal Leonard, por decir uno de los editores.
Además, encontrarás muchos más acordes, más complejos, de los que puedes encontrar en este libro. Éste es un texto para aquellos principiantes que quieren explorar el arte de interpretar los símbolos de los acordes de la música popular. Por eso, incluimos un “Apéndice” que podrá ayudarte con aquellos acordes más complejos que no estén explicados en este libro. Por ejemplo, si ves la indicación C9, deberás tocar C7 como un sustituto aceptable. Esto sucede por varias razones, entre ellas porque el estudio de los acordes comprendidos por las CINCO notas está por encima del alcance de este libro.
El diccionario de acordes de piano intenta solo introducir a los estudiantes principiantes el estudio de los acordes basados en CUATRO notas. El estudio de los acordes más complejos (acordes de 5 notas o más) se basa en el firme conocimiento de las construcciones más simples (los acordes de tres y cuatro notas), por eso, sólo los estudiantes que dominen completamente los acordes de tres o cuatro notas podrán pasar al estudio de las construcciones más complejas.
Además, hay que destacar que todos los acordes explicados en este libro están en la posición llamada “posición de raíz”. Ésta comporta que el nombre de la nota más baja sea aquella que da nombre al acorde (la nota más lejana a la izquierda del piano). En la posición de raíz del acorde C, por ejemplo, la nota C es siempre la nota más baja. Esto es posible, en otras organizaciones más complejas, colocando una de estas notas en la posición más baja, resultando así un sonido más placentero y pulido entre los acordes. Las organizaciones más complejas, conocidas como “acordes invertidos” son más difíciles de estudiar, y están por encima del alcance de este libro.
Los estudiantes, de nuevo, deben estudiar los acordes en posición de raíz primero, ganando práctica en el conocimiento enciclopédico de los acordes en la posición de raíz básica, antes de pasar a un estudio en el arte y ciencia de la inversión de acordes, que es el arte y la ciencia en la que los acordes no llevan el nombre del tono que aparece en la posición más baja.
Por defecto, si no se ha conseguido un aprendizaje de la posición de raíz correcta, el resultado será la confusión. Si pensamos en la Tabla Periódica de los Elementos, en la que los elementos químicos están delineados, un estudiante principiante puede aprender las propiedades del Oxígeno y del Nitrógeno como elementos individuales pero deberá conocerlos antes de mezclarlos en otros componentes más complejos. Sucede lo mismo con los acordes.
De todas maneras, limitar el uso de los acordes a aquellos que tienen una posición de raíz, al principio, hará posible poder pasar a un segundo momento de estudio en el que se introducirán los acordes más complejos y podrán construirse acordes más placenteros.
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